lunes, 9 de febrero de 2009

La niña del roble


¿He visto a una niña en mi jardín o me lo he imaginado? Me ha parecido que se dirigía al viejo roble.

Pues sí, ahí la tengo arrodillada sobre el césped, frente a las raíces emergentes del árbol. Parece que hable con las setas que han crecido en la base. Estará jugando a los gnomos o a los pitufos.

¡Vaya! ¿Quién llama ahora?

- ¿Sí? ¡Ah, hola Ana!

- No, no me había enterado.

- No, Ceferino no se ha pasado por aquí. ¿Ha ocurrido algo malo?

- Espera, luego me lo cuentas que llaman a la puerta.

- Vaya. Hola Ceferino. ¿Vienes en misión oficial o a tomarte el café?

- ¡Gracias, Luisa! Un café nunca es incompatible con estar de servicio.

- Bueno. ¿Me vas a explicar qué es lo que ocurre?

- Claro Luisa. ¿Puedo coger una rosquilla? Ha densamparecido lo hijon do lo Gozalecuadro.

- ¿Cómo? Acaba de tragar, anda.

- Perdón. Decía que ha desaparecido la hija de los González Cuadras: Laura.

- ¿Los González Cuadras? ¿Son del pueblo?

- Bueno, Iñigo González es hijo de Lorenzín, el del molino. Se fue a la Argentina, allí se casó, tuvo una niña y ahora vive en Madrid. Es la primera vez que su mujer y su hija visitan el pueblo.

- ¡Ah! Así que eran ellos los forasteros que estaban con Lorenzín. ¿Y dices que la niña ha desaparecido?

- Hace tres días. Sus padres me han dejado esta foto. Llevaba un vestido azul clarito con pequeñas margaritas blancas.

¡Madre mía! Si es la niña de mi jardín.

- ¿Te suena su cara?

- Sígueme al jardín, Ceferino.

¿Cómo puede llevar tres días desaparecida, si estaba la mar de lozana y tranquila? Seguro que era ella. Jugaba como si nada junto al roble. Ahora no la veo. ¿Se habrá escondido?

- Luisa, ¿qué querías enseñarme?¿Tus rosas nuevas? Son magníficas, pero aún me quedan doce casas del concejo por visitar.

- ¡LAURA!¡LAURA! Sal, cariño. No vamos a hacerte daño.

- ¿Crees que puede estar aquí?

- ¡LAURA! Te juro que hace cinco minutos estaba ahí delante. Debe haberse asustado.

- ¿La has visto?¿Qué aspecto tenía?

- Llevaba el vestido que me has dicho, unas sandalias granates y una cinta a juego que le recogía el pelo en una cola de caballo. Estaba aquí agachada; entre las raíces. Jugaba tan tranquila.

- Todo lo que me cuentas coincide con la descripción que me han hecho sus padres. Pero me parece un poco raro que esté jugando tranquilamente en un jardín desconocido después de pasar tres días fuera. Tiene siete años. Es demasiado chica para escaparse de casa. Quizá se haya dado un golpe y no recuerda dónde tiene que ir.

- Puede. Pero debería sentir miedo si todo lo que la rodea le es extraño, ¿no crees? Debería tener hambre y frío por la noche. Ha pasado fuera dos noches, ¿no? Y la primera de ellas llovió. En algún sitio debe haber buscado refugio. Es posible que se cobijara de la tormenta en alguna casa y la retengan contra su voluntad.

- ¿Y qué hacía entonces en tu jardín?

- Se habrá escapado de sus raptores. ¡LAURA!

- Claro. Escapa y se pone a jugar en tu césped en vez de pedirte ayuda.

- Lo siento. Tú eres el policía y no te he dicho más que tonterías.

- Aún no sabemos qué ha pasado. No descartes ninguna tontería.

- Te juro que estaba jugando aquí mismo. ¿Me crees, verdad?

- Por supuesto, Luisa. Precisamente tú no bromearías con algo así.

- Su madre debe estar pasando un infierno. Espero que todo acabe bien.

- Si la has visto, la encontraremos. No puede estar muy lejos.

- La he visto. Te lo juro por mi hija Clara.

- ¿Todavía piensas que puede aparecer?

- Sólo espero que Laura no corra la misma suerte.

No. No puede suceder algo así otra vez. Es demasiado horrible.


4 comentarios:

  1. Jooooooooooo, ¿sigue o debemos imaginarnos el final?
    Un beso (con intriga)

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  2. Lo cierto es que es un pequeño cuento que me surgió por un sueño. No he escrito la continuación, pero si sois muchos los que preferís que la historia siga, me lo puedo plantear.

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  3. no se si somos muchos pero lo de no dejar las cosas a medias esta bien.
    un beso ( con continuará)

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  4. las historias con finales abiertos dejan de ser propias para pasar a ser del que las termina.

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